Este es el planteamiento inicial de esta serie española de dos temporadas producida por Movistar. Y la verdad es que me ha dejado muy buen sabor de boca. Ultimamente se están haciendo buenas series en España. Me viene ahora mismo a la cabeza Patria, que ya comentamos en este blog, o Antidisturbios, que también hemos comentado.
La segunda temporada, de solo seis episodios, y quizá algo innecesaria, trata sobre un caso de menores que se complica, y cuenta con la aparición de alguno de los personajes de la primera temporada.
Hay dos actores que destacan sobre todo el reparto. En primer lugar, y como no podía ser menos, Candela Peña, que creo que está muy bien interpretando a la jueza. El personaje le queda como anillo al dedo. Ella misma ha confesado que le encanta el personaje y que no descarta que, aunque la serie haya terminado, la jueza pueda aparecer en algún otro momento.
El segundo actor que lleva todo el peso de la serie es el argentino Dario Grandinetti, que interpreta a Díaz, personaje fundamental en la trama, y que aparece en las dos temporadas. Es increible como borda el acento canario siendo argentino.
La propia isla podría ser considerada un personaje más. La fotografía es increible, y la belleza de sus paisajes es un punto a favor para engancharse a la serie. Uno de los puntos fuertes, sin duda.
El resto del reparto está compuesto por actores canarios que están más que correctos, sin olvidar la participación de Antonia San Juan en la primera temporada.
Respecto al guión, creo que aunque este tipo de historia la hemos visto mil veces, está muy bien escrito, y logra algo que no suele ser fácil, y es que en todos los episodios pase algo que te haga aumentar tu interés por la trama. Son pocos los momentos de relleno, y eso se agradece.
Recomiendo ver Hierro. Son 14 episodios de 50 minutos de duración en sus dos temporadas, que se pasan volando. Si Candela Peña decide volver a interpretar a la jueza, que cuente conmigo.
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